domingo, 20 de diciembre de 2009

Just because it's Christmas and at Christmas you tell the truth...


Quiero hablar de un sueño, el sueño que tuve hace un año y es importante porque no me había sentido tan inspirada como en ese momento. Se trata de conocer el amor, no con un nombre o una persona en específico, sólo amor. Se trata de reconocer el sentimiento porque la vida cambia en sí misma de sólo pensar y creer en él.
Es tan simple como caminar separados y reconocer en el otro la verdad por un instante, saber pese a todas las mentiras y las máscaras usadas cotidianamente que ese alguien a quien ves (sin mirarlo a veces) se desnuda ante tí hasta convertirse no sólo en tu reflejo sino en tu motor y la base de cada pensamiento.
A veces decimos "te amo" convencionalmente o decimos "te quiero" a destiempo y sin correspondencia para llenar formularios, cubrir falsas expectativas o por miedo a romper con lo ya logrado y comenzar de nuevo. Sin embargo descubres que nunca las palabras son tan fuertes como la voz que escuchas, las letras que se convierten en pequeñas señales lejanas o la imagen convertida en diferentes seres pero que sabes es a quien amas ¿suena contradictorio? Tal vez pero es la más lógica y mejor forma de explicarlo, de la misma forma que se explica el que me niegue una y otra vez a escribir tu nombre.
Y como todo sueño a veces toca despertar.
Las imágenes se disparan frente a nuestros ojos, claves de lo que el otro deja adentro...
Ya no te busco en la letra de las canciones porque he descubierto que sabes a la melodía que llega sin avisar un 18 de diciembre como la magia que se quedó dentro de mi hace justo un año. Por un momento quise cuestionar eventos pero ¿cómo puede un simple ser humano cuestionar tanto a la vida si a lo único que debiera dedicarse es a sentir?
Entonces cierro los ojos y escucho...
El amor es mi mirada a los seis años plena y llena de ilusiones.
El amor es un par de calcetas en el aire mientras se comparte la culpa de ser un par de niños.
El amor es no haberle dicho que le amaba y huir.
El amor es haber dibujado un paisaje chiapaneco en mis sueños y congelarlo ahi con el azul de sus ojos.
El amor es una taza de café.
El amor son unos ojos tristes que insisten en querer ser libres.
El amor son un par de hoyuelos que se delatan al compás de su risa.
El amor es una simple melodía que describe perfectamente la historia que te quiero contar.
El amor es tu nombre, tu forma, tu nacionalidad, tu ir y venir, tu ausencia, tu vino, tus manos, tus noches de insomnio y jornada de trabajo.
El amor soy yo pensándote de la misma manera en un momento inoportuno. Sólo por que sí.




(just push it is for you)